Invertir en un sistema de Revenue Management (RMS) solía ser una decisión compleja. Después de todo, constituye la columna vertebral de una estrategia de revenue que garantice la optimización de los ingresos y la rentabilidad de tu hotel.
Sin embargo, con la aparición de un mayor número de RMS, ahora tienes a tu disposición una mayor variedad de soluciones intuitivas y fáciles de usar, creadas para equipos de colaboración y muy fáciles y rápidas de implementar. Dada esta tendencia, elegir un RMS ya no tiene que ser una decisión difícil.
1 – Integraciones
Las opciones de integración son una de las consideraciones más importantes a la hora de elegir una nueva tecnología hotelera.
La capacidad de una solución para intercambiar datos con otros sistemas determina la facilidad con la que encajará en su pila tecnológica. En el caso de un RMS, es esencial una sólida integración con su PMS.
Una integración bidireccional es lo mejor, ya que garantiza que los datos se transfieran automáticamente entre los sistemas. Esto elimina los retrasos y los errores humanos, y reduce la carga de trabajo manual.
2 – Tipo de datos utilizados
El tipo de datos que utiliza un RMS influye en la capacidad de predecir la demanda y optimizar las tarifas.
La primera pregunta que hay que hacerse es si el RMS se basa en datos históricos o futuros. Dado el impacto de la pandemia en el sector hotelero, la información histórica no es tan importante como antes.
Los datos prospectivos han cobrado importancia, ya que permiten predecir con mayor precisión las futuras oportunidades de negocio. Para obtener los mejores resultados, elija un RMS que trabaje con información tanto histórica como prospectiva.
A continuación, comprueba si el RMS se basa en datos internos o externos. La información interna es importante porque el rendimiento pasado y el negocio en marcha le dan una idea realista de lo que es posible para tu negocio.
3 – Nivel de automatización
Hoy en día, los equipos de revenue más eficientes deben encontrar formas de hacer más con menos. La automatización es la mejor manera de conseguirlo. Esto no significa sustituir al revenue manager, ni mucho menos. El objetivo es liberar su tiempo y ayudarle a tomar mejores decisiones más rápidamente.
Cuando elijas tu nuevo RMS, ten en cuenta que el nivel de automatización varía según los proveedores. Busca la solución que te ofrezca tanto el mayor grado de automatización como de configurabilidad.
4 – Alineación con tu estrategia de precios
Ahora, comprueba si tu futuro RMS tiene las capacidades que necesitas para implementar tu estrategia de precios. Por ejemplo, algunos RMS sólo optimizan las tarifas para el tipo de habitación base. Las demás categorías de habitaciones se actualizan siguiendo una estructura de suplementos establecida.
Esto funcionaba bien en el pasado, pero en la mayoría de los casos, los mercados son demasiado dinámicos hoy en día para seguir los antiguos modelos de precios rígidos.
Busca un software de Revenue Management con capacidad de fijación de precios abierta si desea más flexibilidad. El mejor RMS entiende que la demanda de cada tipo de habitación es diferente.
5 – Aspectos organizativos y facilidad de uso
Por último, fíjate en los aspectos organizativos. Pregunta al proveedor de RMS cómo funciona el proceso de incorporación y cuánto tiempo lleva.
Aclare también todas las cuestiones relacionadas con los precios. ¿Tiene la instalación un coste adicional? ¿Es suficiente con el plan básico o hay que contratar algunas funciones adicionales? Aunque un RMS no es el lugar para escatimar, es importante que los precios sean transparentes, para que sepas en qué gastos está incurriendo.
Por último, es importante contar con imágenes claras y con la posibilidad de exportar datos como las previsiones de demanda y los informes de rendimiento. Esto te ahorrará tiempo en la preparación de documentos para los altos cargos del hotel y facilitará la presentación de resultados.
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