La recuperación es el objetivo de toda empresa de viajes en este momento. Después de un 2020 desolador en el que España perdió casi 40.000 millones de euros en ingresos, los viajeros están por fin dispuestos a salir y reservar.
Aunque esto puede ser música para los oídos del sector, los presupuestos de marketing son ajustados y la competencia es feroz. Los profesionales del marketing deben aprovechar el aumento de la demanda para impulsar las reservas, y para ello es necesario transmitir el mensaje adecuado, en el canal adecuado y en el momento adecuado.
Esta misión puede parecer una batalla difícil, especialmente porque el mundo sigue cambiando, pero un reciente informe de Skift reveló seis tendencias clave que permitirán a los profesionales de marketing turístico llegar a públicos específicos y acelerar así la recuperación:
1 – Satisfacer las necesidades del consumidor post-COVID
Las necesidades de los viajeros han cambiado y las marcas deben adaptar sus mensajes.
Los protocolos y servicios estándar dependen de un único aspecto: la seguridad. Los usuarios se mueven en el entorno nacional y se alojan más cerca de casa, y a menudo siguen prefiriendo destinos en los que es posible el distanciamiento social.
Los viajes de negocios también están volviendo a aparecer, pero esos viajeros también tienen preferencias diferentes.
Independientemente de si alguien viaja por negocios o por placer, es fundamental transmitir un mensaje claro.
Hoteles y actividades deben proyectar empatía, tener un plan de gestión de crisis actualizado y ofrecer reservas flexibles para adaptarse a los cambios en el comportamiento de los clientes.
Además, los mensajes sobre salud y seguridad deben ser fiables y coherentes, de modo que los clientes sepan exactamente qué pueden esperar en cuanto al uso de mascarillas, distanciamiento social, políticas de limpieza, etc.
Si se toman el tiempo necesario para comprender a los viajeros a nivel granular, las marcas de viajes pueden ofrecer una experiencia que se adapte a sus necesidades y que, en última instancia, supere sus expectativas.
2 – Centrarse en las estrategias de privacidad
En los últimos años, la normativa sobre privacidad ha cambiado drásticamente, incluidos los requisitos del GDPR de Europa, una normativa que seguirá evolucionando.
La privacidad es una preocupación clave para todos los consumidores, y las marcas de viajes deben garantizar el cumplimiento no solo de las normas gubernamentales, sino de las expectativas de los clientes.
Por encima de todo, deben recordar que los datos viajan más allá de las fronteras, y es responsabilidad de cada marca conocer las normas que se aplican allí donde se encuentran los viajeros potenciales.
A medida que los requisitos de privacidad se vuelven más estrictos y los navegadores web se alejan de las cookies de terceros, los vendedores de viajes deben centrar sus esfuerzos en la recopilación de datos de primera mano.
Los sitios web, el check-in sin contacto y los programas de fidelización presentan grandes oportunidades para que las marcas interactúen directamente con los clientes mientras recogen datos cada vez más valiosos.
Aunque algunas de las nuevas normas de privacidad no entrarán en vigor de inmediato, los responsables de marketing deben crear estrategias ahora para adelantarse a estos cambios.
3 – Cambiar los modelos de distribución y las tácticas publicitarias
La mayoría de los presupuestos publicitarios se redujeron drásticamente el año pasado, por lo que es importante examinar los métodos de distribución y adquisición utilizados para encontrar clientes.
Por ejemplo, 2020 demostró que la búsqueda de pago no siempre es más eficaz que la orgánica. 2020 también mostró un aumento de reservas directas en comparación con las OTAs.
Ahora, en lugar de depender únicamente de los canales lineales más tradicionales, muchos hoteles están comprando anuncios de televisión y vídeo conectados. Otros están explorando e implementando modelos de suscripción mensual o anual que ofrecen ventajas adicionales a los huéspedes.
A la vista de las numerosas cancelaciones del año pasado, varias marcas de viajes también están explorando las reservas basadas en comisiones. Esto significa que las empresas de viajes sólo pagan por las estancias reales de los huéspedes, no por las cancelaciones.
Independientemente de las opciones que elijan los anunciantes, ahora es el momento de reevaluar los modelos de distribución y las tácticas publicitarias para hacer frente a las nuevas condiciones del mercado.
4 – Revisar las antiguas métricas
Es imposible que los profesionales del marketing de viajes basen sus campañas publicitarias en datos de 2020. Ahora, las marcas deben revisar las métricas en función de las nuevas circunstancias, los objetivos y el progreso de la recuperación.
Después de un año tan difícil, los viajeros buscan inspiración, lo que abre la puerta a que los profesionales del marketing experimenten con campañas de marca y concienciación.
Los profesionales pueden utilizar nuevos canales, como la televisión conectada, para dirigirse a la parte superior del embudo de ventas e impulsar una mayor concienciación.
También pueden considerar la introducción de experiencias digitales para fidelizar a la marca sin que los viajeros lleguen a poner un pie en el lugar.
5 – La colaboración es clave
La comunidad y la colaboración entre los agentes turísticos es imprescindible para el éxito de la recuperación.
Las organizaciones de marketing de destinos (DMO) pueden beneficiarse especialmente de las campañas de colaboración que distribuyen -y alivian- el gasto al tiempo que impulsan los resultados.
Gracias a las nuevas y mejoradas herramientas y plataformas, pueden impulsar mejor las campañas coordinadas que ponen de relieve el retorno de la inversión a nivel de los participantes.
Este tipo de colaboración puede orientar la recuperación a corto plazo y permitir el crecimiento a largo plazo.
6 – Construir un futuro sostenible
Incluso durante la pandemia, otros acontecimientos globales han dado forma al mundo en el que vivimos actualmente.
La justicia social y racial, la sostenibilidad y otros temas han estado en primera línea de los informativos.
Los usuarios buscan marcas que compartan sus valores, lo que significa que las empresas de viajes deben elaborar mensajes que comuniquen sus compromisos, sus valores fundamentales, etc.
Ahora es el momento perfecto para redefinir las prioridades de la marca y abordar temas como el impacto de los viajes en la sostenibilidad. A partir de ahí, las marcas pueden actuar para demostrar que esos valores son algo más que un simple anuncio.