Para increíble pensar que dos empresas de la magnitud de Priceline y Expedia, precisamente adalides de la innovación tecnológica en la industria de los viajes, puedan ver su futuro mermado por la adopción masiva del blockchain en el sector.
Aunque esta teoría parece poco probable, lo cierto es que hay algunos ejecutivos del sector, como es el caso de Fritz Joussen, CEO del gigante europeo TUI, que están convencidos de que la tecnología blockchain dominará las transacciones y comunicaciones b2b de cinco a diez años, mientras que las implicaciones para los consumidores tardarían un poco más, pero mantienen su potencial para cambiar internet tal y como lo conocemos en este momento.
El argumento de Joussen se basa en el hecho de que empresas como Booking.com y Expedia crean valor para la comunidad de inversores mediante la construcción a escala de «estructuras monopolísticas» que luego monetizan a través de gastos significativos en marketing, de modo que pueden cobrar a los proveedores por el monopolio que han creado.
Pero el blockchain, sostiene, «impide que los monopolios ofrezcan acceso no discriminatorio al contenido».
De momento, TUI ha comenzado con el desarrollo de una versión privada de blockchain, diseñada internamente para optimizar sus procesos internos y la distribución de su inventario. Joussen admite estar indeciso ante la posibilidad de abrir esta cadena a terceros, pero parece entusiasmado por las posibilidades, al mismo tiempo que remarca sus comentarios diciendo que sus ideas son sólo eso, ideas.
Con su iniciativa de blockchain aún desarrollándose internamente, todo indica que aún estamos ante los primeros pasos de una tecnología que podría o no convertirse en una tendencia en el sector, pero parece que los esfuerzos de la compañía han llamada la atención de empresas tecnológicas como IBM. Al fin y al cabo, Joussen piensa que su enfoque sobre blockchain no es exclusivo para la industria de los viajes, y que podría perfectamente aplicarse en otros verticales.
Lógicamente, un trabajo conjunto entre IBM y TUI que pudiera dejar fuera de juego a Booking.com y Expedia es sólo una teoría lejana con muchas partes móviles, además de una situación muy lejana en el tiempo, en caso de producirse.
La idea de que el blockchain puede terminar con los intermediarios es todavía muy relativa. En el sector financiero, por ejemplo, uno podría pensar que la aplicación de blockchain podría acabar con los bancos, pero en realidad son las entidades bancarias las que más están invirtiendo en explorar las posibilidades de esta tecnología para el desarrollo de su propio negocio. Del mismo modo, las grandes agencias online podrían estar investigando cómo llevar este nuevo recurso a su propio terreno. Es algo que veremos en los próximos años.
Lo que sí es cierto es que TUI ya está trabajando con esta nueva tecnología y ha comenzado a ver resultados. Joussen asegura que el grupo tiene a 30 empleados trabajando en blockchain y que dentro de cinco años 30 personas dentro del grupo que trabaja en blockchain y que en un periodo de cinco años la compañía podría estar ahorrando unos 100 millones de euros al año gracias a la adopción de esta tecnología.