Incluso los consumidores que voluntariamente mantienen un altavoz inteligente en sus hogares no confían en ellos con cierta información personal.
Una encuesta reciente de comScore mostró que el 70 por ciento de los propietarios de altavoces inteligentes no han utilizado los suyos para comprar artículos online, lo que representa un gran desafío para el potencial del dispositivo alimentado con inteligencia artificial para servir como un nuevo sistema de compras para el consumidor.
Como muestra este gráfico de Statista, las preocupaciones sobre la seguridad superan a las quejas sobre el rendimiento del producto o sus características como las principales razones por las que los consumidores no compran cosas en sus altavoces inteligentes.
Muchos consumidores todavía no se sienten cómodos compartiendo información de pago o comprando datos con sus altavoces, y la falta de confianza no se resuelve tan fácilmente como un fallo del producto.
Cuando Amazon presentó el Amazon Echo en 2014, muchas personas pensaron que el altavoz inteligente tenía la intención de ayudar a la compañía a vender aún más productos online al proporcionar otra forma más sencillo para que los consumidores realicen un pedido.
Según la encuesta de comScore realizada en el primer trimestre de 2018, solo 3 de cada 10 propietarios de altavoces inteligentes alguna vez han realizado un pedido con el dispositivo.
Las razones para esto son múltiples, pero las preocupaciones de seguridad son el mayor problema para una adopción más amplia de las compras de altavoces inteligentes.