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Rusticae: la pequeña hotelería sobrevive a la debacle turística

Rusticae: la pequeña hotelería sobrevive a la debacle turística

Rusticae: la pequeña hotelería sobrevive a la debacle turística

Durante los meses de julio y agosto, las visitas a la web Rusticae se incrementaron un 40 por ciento respecto al 2019, tanto por la demanda como por la visibilidad digital que trabaja la marca. Estos son algunos de los resultados que arroja el estudio que ha hecho el Club de selección de hoteles con encanto, líder en España, y en el que se ha analizado con detalle el comportamiento del clientes y hoteleros durante estos meses de crisis sanitaria.

El incremento en todos los canales de entrada de tráfico ha supuesto un 47 por ciento más frente 2019, siendo los buscadores, tanto el orgánico, como el SEM, como el canal email los que más han crecido.

Además del incremento de los KPIs de captación de tráfico, los datos de comportamiento arrojan casi un 10 por ciento más de tiempo en página y un incremento de 1,23 páginas vistas por usuario, lo que se traduce en que han accedido más usuarios, durante más tiempo y consumiendo más páginas de información en Rusticae.

“Nuestras cifras lo confirman –explica Isabel Llorens, fundadora de Rusticae–. Esta anómala situación que se está viviendo ha reforzado a este Club de hoteles, casas de alquiler completo y apartamentos, que sigue aportando al mercado nacional la mejor selección de establecimientos de calidad”.

El buscador interno de la plataforma web de Rusticae creció un 125 por ciento frente al año anterior, siendo las consultas más solicitadas a nivel interno Asturias, Cuenca, Galicia, León, Madrid, Portugal, Cantabria, Castellón, Girona y Hondarribia.

“Resulta llamativo como los términos de búsqueda ‘casa rural’ y ‘turismo rural’, que tenían una demanda sostenida durante los últimos cinco años, incluso casi negativa, hasta finales de abril de 2020, se disparan doblando y triplicando la cifra en los últimos meses”, comenta Rubén Pérez, director de Distribución de Rusticae.

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Los hoteleros Rusticae se han enfrentado este verano a la temporada más complicada vivida en los últimos tiempos. La incertidumbre ha sido la constante que ha puesto a prueba su capacidad de gestión, donde la experiencia acumulada durante tantos años de servicio no parecía ser suficiente para afrontar el reto de una nueva realidad.

Sin embargo, a puertas de despedir esta anómala temporada estival, los resultados no han sido nada desfavorables para la gran mayoría. Con la suficiente antelación para preparar sus espacios y sus equipos de trabajo, “la operación salida les permitió conectar con un cliente, mayoritariamente nacional, que demandaba espacios naturales, abiertos, poco masificados y de confianza.

Los meses de julio y agosto han sido un devenir de reservas, cancelaciones y reservas de última hora, acompañadas de infinidad de preguntas que, de forma individual y como miembros de Rusticae han sabido contestar. Algo a destacar y de lo que nos sentimos muy orgullosos”, continúa Llorens.

En cuanto a la ocupación de los alojamientos Rusticae, en Navarra, Galicia, Castilla León y Asturias han llegado a rozar el 100 por ciento de ocupación durante los meses de julio y agosto. Una clientela nacional fiel a sus marcas que ha apostado por el turismo interno, “han sido quienes les han permitido mantener el barco a flote en aguas revueltas”.

Los alojamientos más perjudicados, con una ocupación media del 50 por ciento, han sido los ubicados en destinos sujetos a restricciones de movimiento y mayor dependencia al cliente internacional.

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