Google ha destacado tres tendencias que ha detectado en las búsquedas dentro del sector de los viajes, diez meses después del primer brote de coronavirus.
Aunque no son sorprendentes, estos datos sirven como confirmación de cómo se sienten y se comportan los consumidores en lo que respecta a su capacidad (o no) de viajar.
Laura-Marie Arens, directora de la búsqueda vertical de viajes de Google, APAC, asegura que la compañía ve cómo las consultas sobre viajes en las búsquedas disminuyeron a un tercio de los niveles normales en marzo y abril, pero comenzaron a recuperarse en mayo.
Durante el evento virtual de WebinTravel Travel Zero.0 esta semana, ha declarado que el tipo de consultas de búsqueda fueron muy diferentes para los destinos y atracciones, en comparación con los de las noticias sobre COVID-19 y restricciones locales.
Destacando la primera tendencia, Arens asegura que los viajeros están indecisos. Un estudio interno realizado en julio reveló que el 84 por ciento de las búsquedas fueron sobre cierres de fronteras, prohibiciones de viaje y requisitos de entrada.
La segunda tendencia se refiere a la salud y la seguridad, ya que Google realizó un estudio en toda la región de Asia-Pacífico en agosto que reveló que el riesgo de infección por el virus seguía siendo importante en lo que respecta al sentimiento de viaje.
También confirma la tendencia de los viajes internos, destacada por muchas empresas de inteligencia de mercado en los últimos meses, dado que los consumidores están optando por destinos locales y menos concurridos.
Un estudio de Google sobre los consumidores, realizado en agosto, muestra que casi un tercio de los consumidores tiene previsto viajar al interior del país en los próximos seis meses.
Si se les hace la misma pregunta sobre los viajes internacionales, si se levantan las restricciones, menos del 10% dice que viajará en los próximos seis meses.
Por último, los alojamientos privados también se están recuperando más rápidamente que otros tipos de alojamiento a nivel mundial, afirma Arens.
«El alquiler de vacaciones se percibe como una opción más segura, es más fácil practicar el distanciamiento social y puedes cocinar tu propia comida».
Hay algunas excepciones, dice, dado que los consumidores chinos creen que los hoteles son más seguros.