Cuando un país se enfrenta a una crisis de las dimensiones que ha supuesto la llegada del coronavirus, la percepción de la gestión del Gobierno y su reputación en general suelen alterarse por diversos motivos y en diferentes sentidos. Esto es lo que ha pasado a nivel global este año y que se refleja en el último Índice de Marcas Nacionales realizado por Ipsos (NBI- Nation Brands Index).
Un ranking que lidera Alemania por cuarto año consecutivo y por sexta vez en total. Los factores que le han llevado a lograr este hito se basan sobre todo en su reputación en áreas como exportaciones, inmigración e inversión, cultura y la fortaleza de su Gobierno. Los ciudadanos de todo el mundo tienen sentimientos positivos sobre la compra de productos alemanes, la capacidad de generar empleo del país y el atractivo de invertir en empresas alemanas.
En esta edición del NBI hay movimientos muy destacados como el del Reino Unido, que salta del cuarto al segundo lugar, y Australia, que sube dos puestos hasta la octava posición, marcando un récord para ambos países.
En el otro lado se encuentran las naciones que han visto cómo su reputación caía de forma más acentuada, como Francia, que baja del segundo lugar el año pasado al quinto en esta edición, y Estados Unidos, que tras una fuerte caída en 2017 que le llevó al sexto lugar, y después de unos años de estabilización, vuelve a bajar hasta el décimo lugar. Estos descensos suponen un mínimo histórico para ambos países.
Completan el top 10 Canadá, que se mantienen en la tercera posición, Japón que sube un puesto hasta la cuarta, Italia que asciende de la séptima a la sexta posición, al igual que Suiza que sube un puesto hasta el 7º, y por último, Suecia que mantiene la novena posición.
Los resultados de España en el NBI 2020
España se encuentra entre los 15 primeros puestos del ranking del NBI 2020. Las fortalezas de la “Marca España” las encontramos en el turismo y la cultura, aspectos que centran la mayoría de las opiniones positivas relacionadas con nuestros centros urbanos llenos de vida, así como la amabilidad y el carácter acogedor de sus habitantes.
En el otro lado de la balanza, como los puntos más débiles del país, encontramos las exportaciones, todo en lo relativos a ciencia y tecnología, y la gestión del Gobierno, donde la protección del medio ambiente sigue siendo una asignatura pendiente.
El impacto de la Covid-19 en la reputación de China y Estados Unidos
En el primer ranking realizado tras la llegada de la pandemia del coronavirus, Estados Unidos y China son los países que registran una caída más notable en el NBI.
En el primer caso, EE.UU ocupó el primer puesto en siete ocasiones, este año marca un descenso de cuatro posiciones frente al año pasado hasta quedar décima en la lista. Las causas de esta caída son, principalmente, la negativa opinión pública sobre su Gobierno, las actitudes de su población, el turismo, y también a sus políticas de inmigración e inversión.
En el caso de China, que se había mantenido estable en el puesto 23 en los últimos cuatro años, cae doce posiciones hasta situarse en el 35º. La disminución de reputación es aspectos como su Gobierno, población, turismo, inmigración e inversión, han provocado este cambio en la percepción sobre esta nación.
El resultado para ambos países en 2020 supone su peor posición en el histórico del índice NBI, además, tanto Estados Unidos como China ven mermada su reputación en los mismos aspectos, lo que implica que los dos deben trabajar en la misma dirección para paliar los efectos sobre su imagen de las tensiones comerciales y el impacto del coronavirus.