Las empresas hoteleras podrían enfrentarse a una mayor presión en el futuro, ya que la demanda de viajeros corporativos sigue siendo baja por el momento y existen más alternativas de alojamiento en el mercado.
Así lo ve Glenn Fogel, presidente y CEO de Booking Holdings, que cree que esta evolución del mercado podría ser beneficioso para los intermediarios a largo plazo.
Durante una Conferencia Global de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones de RBC, Fogel ha asegurado que la compañía podría estar bien posicionada para tomar ventaja debido a su combinación de inventario de hoteles y alojamientos privados.
«Si fuera un hotel, me preocuparía porque los viajes corporativos están disminuyendo, pero también porque hay un cambio en el número de personas que eligen un alojamiento alternativo».
Durante la última Conferencia de Phocuswright, el propio Fogel compartió cifras que muestran que el alojamiento privado representó el 40 por ciento de las nuevas reservas en el segundo trimestre del año, y el 33 por ciento de las nuevas reservas en el tercer trimestre. Ambos porcentajes han crecido en el último año.
«Definitivamente hay gente que anteriormente no habría buscado un alojamiento alternativo, pero esa ha sido una tendencia desde hace mucho tiempo. La pandemia y el deseo de estar más seguros y salir de las ciudades adelantaron la demanda de alojamiento alternativo. A partir de ahora, cuando los viajeros consideren dónde se van a alojar, compararán el alojamiento alternativo a la misma altura que los hoteles».
Fogel añadiço que «cuanta más oferta haya y más fragmentación sea esta se generará una posición más fuerte para los distribuidores, así como conversaciones un poco más sencillas con los hoteles que buscan nueva demanda».
Información original en Phocuswire.
