Para algunos anfitriones de Airbnb, la relación con la compañía de San Francisco está rota para siempre.
Cientos de ellos, lo que significa más de 10.000 anuncios en la plataforma, están emprendiendo acciones legales contra Airbnb, según Bryant Greening, abogado de LegalRideshare.
Otros intentan evitar a Airbnb reservando directamente a los huéspedes. El año pasado, las reservas directas representaron el 25 por ciento de las reservas entre los administradores de alquileres encuestados por Hostfully, una empresa de software de viajes, frente al 19 por ciento en 2019.
«Gran parte del daño es permanente», explica Jasper Ribbers, que dirige Get Paid for Your Pad, una empresa en Barcelona que asesora a operadores de alquiler a corto plazo. «La confianza ha desaparecido, en cierto modo».
La fractura se produce en un momento crucial para Airbnb. La empresa, que salió a bolsa en diciembre e inmediatamente superó los 100.000 millones de dólares de valoración, se enfrenta a grandes expectativas mientras el precio de sus acciones se ha disparado aún más desde su salida. Airbnb tiene previsto presentar sus primeros resultados como empresa pública el 25 de febrero.
Eso pone a la compañía de San Francisco bajo presión para mostrar un negocio próspero, y su principal vía de negocio es la comisión sobre las tarifas cuando la gente reserva las propiedades que los anfitriones anuncian en su web.
Los anfitriones de Airbnb explican que muchos de sus problemas con la empresa comenzaron el 14 de marzo, tres días después de que la Organización Mundial de la Salud declarara la pandemia. Fue entonces cuando Airbnb promulgó una «política de circunstancias atenuantes».
El cambio enfureció a muchos operadores de alquileres, que anteriormente habían elegido sus propias políticas de cancelación, incluida la opción de no reembolso.
La nueva política permitía a los huéspedes cancelar con un reembolso completo, anulando las preferencias de algunos anfitriones. Muchos vieron desaparecer su medio de vida de la noche a la mañana.
Por su parte Catherine Powell, jefa de alojamiento de Airbnb, considera que la opinión de los anfitriones sobre su relación con la empresa mejoró un 17% entre enero de 2020 y el mes pasado. «Nuestra relación con los anfitriones es increíblemente importante», dijo. «Nuestros anfitriones son lo que impulsa a Airbnb».
Información original en The New York Times.