Airbnb ha puesto sus ojos en Latinoamérica como un nuevo mercado de expansión. En la faceta legal, siempre controvertida para la compañía, Airbnb ha decidido adoptar un nuevo enfoque: darle a las administraciones exactamente lo que quieren.
La firma, tal y como informa Bloomberg, ha llegado un acuerdo con las autoridades de Ciudad de México para recaudar y remitir los impuestos correspondientes, en lo que supone el primer acuerdo de este tipo en América Latina.
Airbnb proporcionará el 3 por ciento de los ingresos generados por las reservas de sus anfitriones en la Ciudad de México al gobierno de la ciudad. Los hoteles también pagan un impuesto de alojamiento del 3 por ciento a los funcionarios locales.
Airbnb dijo que tiene la intención de replicar el modelo fiscal en toda la región. Los esfuerzos políticos de Airbnb son cada vez más globales. El jueves, la compañía anunció acuerdos adicionales con gobiernos locales en China e India.
América Latina es ahora el mercado de más rápido crecimiento para Airbnb, superando a Japón. La empresa tiene 250.000 propiedades listadas en la región, que abarca México, América del Sur y partes del Caribe, incluyendo Cuba. Airbnb asegura que las reservas en Latinoamérica han aumentado un 148 por ciento en el último año.
Airbnb está tomando un nuevo enfoque con las ciudades antes de que puedan surgir posibles conflictos. Aunque ha acordado informar sobre los impuestos en nombre de sus anfitriones en Nueva York, San Francisco y otras ciudades, la compañía también ha tenido largas batallas con las ciudades, algunas resueltas en los tribunales.
Este mes, Airbnb presentó una demanda a la ciudad de San Francisco y acordó registrar a los anfitriones de Nueva York en una base de datos estatal. Sin embargo, la compañía sigue luchando contra las administraciones locales en Barcelona, Miami, el sur de California y otros lugares en temas relacionados con la vivienda.
Chris Lehane, director de política de Airbnb, dijo que la compañía planea adoptar un enfoque amistoso en toda Latinoamérica. Actualmente está discutiendo acuerdos similares a los de la Ciudad de México con los gobiernos de Buenos Aires y Sao Paulo. «Esto es sólo el comienzo», dijo. «Estamos preparados para ser flexibles y experimentar».