En los últimos meses se ha producido, probablemente, una gran exageración alrededor de blockchain, la tecnología que respalda las criptomonedas como Bitcoin, pero lo cierto es que su aplicación en la industria de los viajes está cobrando impulso.
Empresas del sector como TUI ha puesto en marcha ambiciosos planes para sacar todo el provecho de esta nueva tecnología.
Tal y como explicó en una entrevista reciente el director ejecutivo de la compañía, Fritz Joussen, la compañía vendió su banco de camas Hotelbeds por 1.190 millones de euros porque «decidimos reorganizar fundamentalmente toda la cartera de camas de hotel de TUI Group y colocarla en una cadena de blobkchain».
Este es un movimiento bastante audaz y avanzado de TUI, que podría desafiar al modelo tradicional de operador turístico, asegura Joerg Esser, físico teórico y ex ejecutivo de Thomas Cook, y uno de los ponentes del evento centrado en tecnología digital para los viajes que organiza en Ámsterdam la compañía Eyefortravel.
Otro de los ponentes, Wilhelm Weber, socio de Swiss Hospitality Solutions, también cree en el potencial disruptivo de blockchain. «En las entidades de la industria de viajes, como las OTAs o los operadores turísticos, se cierra la brecha en la confianza entre un comprador y el proveedor. Dado que los viajeros confían en estas empresas tanto como para reservar con ellas e incluso pagar por anticipado, estas compañías obtienen un margen bastante importante por este servicio. Un sistema basado en blockchain le permitiría al proveedor interactuar directamente con el viajero a un coste mucho menor «.