Booking ha dado un paso significativo en el enfrentamiento judicial que sostiene en España. La empresa presentó recientemente un recurso ante la Audiencia Nacional, buscando frenar la ejecución de una multa de 413 millones de euros impuesta por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Esta sanción, la mayor impuesta hasta la fecha por el regulador español, acusa a la compañía de abuso de posición dominante en el mercado de reservas hoteleras, así como de exigir cláusulas de paridad de precios a los establecimientos hoteleros. De ser aceptado el recurso, la acción bloqueará temporalmente las numerosas demandas interpuestas por hoteleros en el país.
La sanción más alta de la historia de la CNMC
El 30 de julio, la CNMC confirmó la sanción de 413 millones de euros, una cifra que inicialmente había valorado en 486 millones. Este monto supera a otras multas históricas, como los 203 millones de euros a las compañías de obra civil en 2022, los 194 millones a Amazon y Apple en 2023, o los 154 millones impuestos a Atresmedia y Mediaset en 2019.
Esta penalización, sin precedentes en el ámbito de las reservas hoteleras, responde a una acusación formalizada en 2021 por la Asociación Española de Directores de Hotel y la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid, quienes denunciaron a Booking ante la CNMC por prácticas monopolísticas y una restricción a la competencia.
Las asociaciones alegaron que las cláusulas de paridad impuestas por la plataforma impedían a los hoteles ofrecer precios más bajos en sus propios canales de venta directa, como sus páginas web. Esta limitación, aseguran, afectó de manera importante la rentabilidad y la libertad comercial de los establecimientos, situándolos en una desventaja competitiva al verse obligados a mantener los precios establecidos por Booking.
El recurso judicial y la cascada de reclamaciones hoteleras
La decisión de Booking de recurrir ante la Audiencia Nacional tiene un efecto inmediato en las reclamaciones por daños y perjuicios interpuestas por los hoteleros. Al quedar el caso en revisión judicial, todas las demandas de indemnización se paralizan automáticamente hasta que la Audiencia emita una decisión definitiva sobre la legalidad de la sanción impuesta por la CNMC.
Esta estrategia permite a Booking ganar tiempo frente a las decenas de reclamaciones millonarias en su contra, que buscan compensación por los perjuicios económicos sufridos por la imposición de las cláusulas de paridad. Sin embargo, el recurso no elimina la preocupación en el sector hotelero, que ve en este aplazamiento una prolongación de las prácticas que consideran abusivas y perjudiciales para su competitividad.
Bruselas declara a Booking como «gatekeeper» y establece límites a su actividad
Los problemas legales de Booking no se limitan a España. El pasado 13 de mayo, la Comisión Europea incluyó a la plataforma como la séptima compañía en la lista de «gatekeepers» o guardianes digitales, sumándola a otras grandes tecnológicas como Apple, Microsoft, Meta, Alphabet, Amazon y ByteDance.
Esta clasificación, derivada de la Ley de Mercados Digitales de la Unión Europea, está reservada para empresas que cumplen tres criterios simultáneos: contar con más de 45 millones de usuarios activos, tener una capitalización bursátil de al menos 750.000 millones de euros, y haber sostenido estos indicadores durante al menos tres años consecutivos.
La inclusión en esta lista implica restricciones en las actividades de Booking en Europa, particularmente en lo que se refiere a la competencia. Entre las limitaciones, la UE exige a estas compañías mayor transparencia en sus prácticas y les impide actuar en contra de las normativas de libre competencia. En respuesta a esta nueva legislación, Booking anunció, tan solo dos meses después, la eliminación de las cláusulas de paridad de precios de sus contratos.
Sin embargo, esta medida, aunque bien recibida, no apaciguó las demandas de compensación económica por parte de los hoteleros, quienes afirman haber sido afectados por años debido a la imposición de estas cláusulas restrictivas.
Un contexto de crecimiento económico en medio de conflictos legales
A pesar de los retos judiciales, Booking ha registrado un desempeño económico sin precedentes. La compañía cerró 2023 con una facturación histórica cercana a los 20.000 millones de euros y un beneficio de 3.961 millones, el segundo más alto en su historia, solo superado por el obtenido en 2019. Estas cifras reflejan la fuerte demanda de reservas hoteleras a nivel global y el poder de atracción de la plataforma, que sigue siendo líder en el mercado.
Sin embargo, el éxito financiero de Booking no ha sido suficiente para evitar la creciente presión legal y regulatoria. Las asociaciones hoteleras en España, que impulsaron la denuncia en 2021, sostienen que las ganancias de la plataforma han sido posibles en parte gracias a prácticas de mercado que han limitado el crecimiento de los establecimientos hoteleros.
Estos consideran que, de no haberse impuesto las cláusulas de paridad, los hoteles habrían podido gestionar sus tarifas de manera más competitiva, ofreciendo precios más atractivos y atrayendo a más clientes a través de sus propios canales de venta.
Perspectivas futuras y expectativas del sector hotelero
El recurso interpuesto por Booking ante la Audiencia Nacional representa un intento de la compañía por evitar el impacto financiero de la multa de la CNMC, así como de las demandas hoteleras. Sin embargo, el sector hotelero español mantiene la esperanza de que el proceso judicial avance de forma favorable para sus intereses, permitiendo que las reclamaciones puedan prosperar y se establezcan precedentes legales que protejan a los establecimientos de futuras prácticas restrictivas.
Al mismo tiempo, las asociaciones de hoteleros insisten en la necesidad de una regulación más estricta en el mercado de las plataformas de reservas online. La presión del sector para que se implementen normativas que permitan una competencia justa y transparente sigue aumentando, en especial en un contexto en el que el turismo se recupera de los efectos de la pandemia y busca adaptarse a las nuevas dinámicas de consumo y digitalización.
Un debate abierto sobre el futuro de las reservas hoteleras
El caso de Booking y la CNMC ha abierto un debate sobre la relación entre los gigantes tecnológicos y los sectores tradicionales, en particular sobre la capacidad de las plataformas digitales para influir en los precios y las políticas de los establecimientos locales. La respuesta de Bruselas, con la implementación de la Ley de Mercados Digitales, marca un punto de inflexión en la regulación de las plataformas de reservas online y establece un marco más riguroso para proteger la libre competencia en el sector hotelero.
Mientras se espera la resolución final de este conflicto judicial, tanto los hoteleros como las plataformas de reservas deberán encontrar un equilibrio entre la innovación digital y el respeto a las reglas de competencia. La situación de Booking en España se ha convertido en un referente para otros países, que observan con interés el desarrollo de este caso y sus implicaciones en el mercado global de las reservas hoteleras.
Este proceso legal representa un reto y, al mismo tiempo, una oportunidad para que el sector turístico y las plataformas tecnológicas revisen sus modelos de negocio y aseguren un desarrollo sostenible y equitativo en el contexto de un mercado cada vez más digitalizado.
Información original en Cinco Días.