La personalización del viaje es uno de los temas más recurrentes cuando se habla de nuevas formas de llegar a los clientes. Hasta tal punto llega esta tendencia que empresas como DNA Unwrapped están combinando nuestra información genético con información de nuestra ascendencia para proporcionar a los viajeros una experiencia única.
DNA Unwrapped cuenta con una rama específica dedicada al mundo de los viajes, Travel Unwrapped, que recientemente comenzó a ofrecer a sus clientes potenciales una prueba de ADN para que pudieran seleccionar destinos basados en su composición genética.
Esta campaña nos recuerda la ya realizada el pasado verano por Momondo, pero según la directora ejecutiva Rebecca Fielding, esto va más allá en términos de cultivar la comprensión de la diferencia de cada persona. En su opinión, «el increíble conocimiento que dan las pruebas de ADN supone una oportunidad para ver el mundo a través de nuevos ojos».
Fielding añade que los viajeros buscan destinos de formas cada vez más únicas, y que viajar allí donde se encontraban nuestros ancestros es una auténtica experiencia cultural.
La compañía se asoció con Living DNA, una empresa que investiga en el ADN del usuario de un modo más detallado y que tiene en cuenta 5.000 años de migraciones.
Según Fielding, algunas administraciones turísticas se han interesado ya por este trabajo y espera que esta forma de buscar viajes se convierta en una nueva manera de conectar más allá de las –ya tradicionales– redes sociales.