La Asociación Española de Profesionales del Turismo (AEPT) ha emitido un comunicado para manifestar su estupor y disgusto ante los hechos y las propuestas tan dispares, que desde los organismos públicos se están proyectando.
«Hemos escuchado con inquietud cómo la Ministra de Trabajo anunciaba que las industrias productivas iniciarían su actividad de cara al verano; y el Turismo no se encontraba entre ellas. Poco después, la Ministra de Economía rectificaba incorporando el Turismo entre las actividades a reanudar de cara al verano», explica la carta.
Según la AEPT, es necesario destacar una vez más que esta industria “no productiva”, según la Ministra de Trabajo, ha proporcionado trabajo a 2’6 millones de personas en 2019 (3,7% más que en 2018) en España, aportando unos ingresos globales de 176.000 millones de euros, más de un 14% del PIB (según datos WTTC).
Además, conviene recordar, que la industria turística ha actuado como motor en la recuperación de crisis anteriores, porque de ella depende buena parte de la producción de otras industrias, las que proveen de materia prima para alimentación de nuestros millones de turistas, por ejemplo, o la misma industria automovilística por la flota de alquiler a disposición de nuestros visitantes, o el comercio, al que está íntimamente ligado, y su cadena de producción.
La AEPT solicita que la Ministra de Turismo forme parte del grupo de expertos que está gestionando esta crisis, agilidad y celeridad a la hora de señalar y detallar cuáles serán las medidas y unir las voces de los diferentes profesionales turísticos en un manifiesto conjunto para solicitar al gobierno de España que declare al turismo español como sector catastrófico, al ser el sector más afectado por la pandemia.
Finalmente, la AEPT ha exigido las siguientes medidas:
- No dar por perdida la campaña de verano 2020.
- Manifestar al turismo como industria productiva.
- Declarar al turismo como bien de interés general.
Empezar progresivamente con actividades seguras y no masivas, con todas las medidas necesarias para garantizar la protección de la salud. - Considerar al turismo como una «prioridad absoluta» a la hora de crear líneas específicas de ayuda, tanto económicas como sociales.
- Ayudar a las empresas en el rediseño de sus servicios y productos para adaptarse a la nueva realidad de los mercados emisores.
- Prestar especial atención por su singularidad a los pequeños negocios y a la oferta complementaria tanto en turismo como en hostelería y ocio.
- Trabajar en la segmentación micro y small data para buscar nuevos nichos de mercado durante el proceso de reactivación.
- Adherirse a la propuesta de la Unión Europea de permitir los vuelos dentro de nuestro espacio común a partir de julio.