El segmento de nómadas digitales y trabajadores remotos ha crecido a pasos agigantados durante la pandemia. Sin embargo, algo que para unos es una total novedad, algunos destinos llevan años cultivando y trabajando para asegurar que sus destinos son atractivos para este tipo de profesionales.
Es el caso de David Blay y Carlos Jonay Suárez, co-fundadores de la Escuela de Trabajo Remoto, e involucrados desde 2015 en diversos proyectos relacionados con este mercado.
Ambos participaron recientemente en un coloquio sobre las oportunidades de negocio que presenta este mercado a destinos turísticos maduros, ofreciendo sus conocimientos y respuestas.
Desestacionalización y valor añadido
Un buen ejemplo es el proyecto Pueblos Remotos, co fundado por Carlos Jonay, que acerca a trabajadores remotos a pequeñas poblaciones canarias, fomentando la interacción entre estos profesionales y emprendedores y empresarios locales, creando sinergias realmente interesantes. Como ellos mismos lo definen, la “ruralidad conectada”.
Y es que si algo caracteriza al perfil del trabajador remoto, es que suele tener un perfil con formación superior, alto poder adquisitivo y estancias largas. Es por ello que resulta un tipo de visitante realmente atractivo para los destinos, enriqueciendo a la población local, a nivel social y económico.
Otro punto a favor de atraer a estos perfiles es su carácter ajeno a la estacionalidad. Suelen quedarse en el destino entre 3 semanas y 6 meses, por lo que se convierten en activadores de la economía local, especialmente en localidades turísticas españolas muy dependientes de los flujos habituales de turistas en ciertas épocas del año.
Es importante resaltar además que el concepto habitual de persona joven mochilera está dando paso a otros perfiles: directivos de empresas tecnológicas, emprendedores digitales, y familias, que es un nuevo segmento creciente que aporta especial valor al destino.
¿Qué busca el nómada digital en el destino?
Carlos Jonay destacaba: Comunidad, Conexión, Clima, Coste de vida y Conectividad.
La comunidad suele generarse en los espacios de coliving y coworking. En cuanto a la conexión, referida específicamente a internet y la calidad de banda. El clima suele ser una carta a favor de destinos con climas amables. El coste de vida no se ciñe solamente a que sea bajo, sino que existan condiciones adaptadas a las necesidades del visitante, tanto en la parte económica como en el gran lujo. Y conectividad, referida a las comunicaciones aéreas, terrestres, etc… para poder viajar cómodamente.
La importancia de la comunicación
Portugal, Bali, Tailandia, suelen ser los primeros destinos que vienen a la mente de quien habla de destinos top globales para este tipo de visitante.
La razón es simple: Comunicación. Una labor constante de comunicación en medios, trabajando duro en hacerse oír a nivel global, creación constante de contenidos.
Algo que en España llevan años haciendo desde Canarias, primero desde la iniciativa privada (Nacho Rodríguez y Repeople), que posteriormente ha recibido ayuda del sector público, sector que no es ajeno a los beneficios que estos visitantes llevan a su región.
Normativa
Países de nuestro entorno como Portugal o Croacia, conocedores del gran potencial que este segmento representa, sí han dado el paso y han creado leyes ad hoc para adaptarse a las necesidades de estos perfiles.
Pese a que España no posee aún una normativa adaptada a ese nivel, los expertos coincidían en que la nueva ley de startups es un gran paso en la buena dirección, para aportar estabilidad y seguridad a estos profesionales.
Este debate sirvió de puesta de largo del curso presencial organizado por la Universidad de Alicante (Sede Torrevieja) que arrancará el 11 de Febrero, y que acercará a la localidad alicantina a algunos de los mayores expertos nacionales e internacionales en el área de los nómadas digitales.
Pablo Torres es un consultor hotelero español con sede en Londres, con 20 años de experiencia en el sector.
Ha trabajado 10 años en Hoteles de 5* (Operaciones, Rooms & Revenue Management), y como consultor y formador ha implementado, desde 2011, proyectos en más de 150 hoteles en 25 países de todo el mundo, habiendo formado directamente a más de 2,000 profesionales.