La CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) ha aprobado la Resolución en la que considera que el objetivo principal del nuevo servicio de transporte internacional de viajeros por tren comunicado por Intermodalidad del Levante, S.A. (ILSA) entre Madrid y Montpellier es el tráfico internacional de viajeros.
En la actualidad, los servicios de tráfico internacional de pasajeros, es decir, entre diversos Estados Miembros, están abiertos a la competencia, mientras que, en el caso de los servicios nacionales, los diferentes países de la Unión Europea tienen de plazo hasta 2020 para completar su liberalización.
Análisis de la CNMC
La CNMC considera que el lanzamiento de este nuevo servicio internacional entre Madrid y Montpellier tendrá efectos positivos para los usuarios, dado que triplicará las frecuencias actuales entre Madrid y la ciudad francesa y las incrementará en un 50% desde Barcelona. Con ellas, se reducirá el tiempo total del viaje y mejorará la oferta ferroviaria actual.
Además, los tiempos de viaje propuestos por ILSA son un 10% inferiores a los de RENFE y serán, según la información remitida por el operador, más baratos.
Madrid y Barcelona con Francia
En primer lugar, según el análisis de la demanda del servicio, ILSA conectará Madrid y Barcelona con tres departamentos franceses, que suman casi 2 millones de habitantes. Las previsiones de esta empresa son similares a la demanda real de trayectos con duraciones y población cubiertas similares, como Madrid-Huelva o Cádiz.
En segundo lugar, a partir de la demanda real de los servicios internacionales de RENFE, se han construido 4 escenarios. En ellos se han incluido distintos supuestos de crecimiento del número de pasajeros, en función de las mayores frecuencias y menor precio de los billetes. Además, se han realizado hipótesis sobre la cuota de mercado que alcanzará ILSA en el trayecto Madrid-Zaragoza-Barcelona-sur de Francia.
Conclusiones del análisis
La CNMC ha valorado que ILSA se haya comprometido a aportar información semestral sobre el número de viajeros entre las diferentes estaciones y los ingresos obtenidos, limitando la venta de billetes nacionales en caso que superen el 70% fijado en dicha Resolución.
Estos compromisos aseguran el cumplimiento de los límites señalados por la CNMC al tráfico entre Madrid y Barcelona hasta que, con la transposición del 4º Paquete Ferroviario, se liberalicen los servicios nacionales.
A partir de ahora, la CNMC analizará la solicitud de intervención solicitada por Ilsa para poder utilizar los trenes de la serie S-100 de Alstom propiedad de Renfe Alquiler.